¿Por qué salen granos en la espalda?

El acné es una afección cutánea común que puede afectar a diversas partes del cuerpo, incluida la espalda. Esta condición, conocida como acné en la espalda o «bacné», puede ser molesta y afectar a la autoestima de quienes la padecen. Te contamos todo sobre los granos en la espalda: sus causas, tipos y cómo prevenirlo de manera efectiva. ¡No te lo pierdas!

¿Qué es el acné en la espalda?

El acné en la espalda es una manifestación del acné vulgar que aparece en la zona dorsal. Similar al acné facial, se caracteriza por la presencia de comedones, espinillas, pápulas, pústulas, nódulos y, en casos severos, quistes. La espalda es propensa a desarrollar acné debido a la mayor cantidad de glándulas sebáceas que producen sebo, una sustancia oleosa que puede obstruir los poros.

Causas del acné en la espalda

 

El acné en la espalda puede ser causado por varios factores:

1. Producción excesiva de sebo: Las glándulas sebáceas en la espalda pueden producir una cantidad excesiva de sebo, lo que puede obstruir los poros.
2. Acumulación de células muertas: Las células muertas de la piel pueden acumularse en la superficie y mezclarse con el sebo, bloqueando los poros.
3. Bacterias: La bacteria Propionibacterium acnes, que vive en la piel, puede proliferar en los poros obstruidos, causando inflamación e infección.
4. Fricción y sudor:La ropa ajustada, las mochilas, y la sudoración excesiva pueden irritar la piel y contribuir a la aparición de acné.
5. Factores hormonales: Las fluctuaciones hormonales, especialmente durante la adolescencia, pueden aumentar la producción de sebo y provocar acné.
6. Genética: La predisposición genética puede desempeñar un papel importante en el desarrollo del acné.

Tipos de granos en la espalda

 

El acné en la espalda puede presentarse de diversas formas, cada una con sus características específicas:

1. Comedones: Son lesiones no inflamatorias que pueden ser abiertas (puntos negros) o cerradas (puntos blancos).
2. Pápulas: Pequeñas protuberancias rosadas o rojas que son inflamatorias, pero no contienen pus.
3. Pústulas: Lesiones inflamatorias llenas de pus, comúnmente conocidas como granos.
4. Nódulos: Protuberancias grandes y dolorosas que se desarrollan debajo de la superficie de la piel.
5. Quistes: Lesiones profundas, dolorosas y llenas de pus que pueden causar cicatrices.

¿Cómo prevenir los granos en la espalda?

 

Prevenir el acné en la espalda requiere una combinación de buenos hábitos de higiene, cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, tratamiento médico. Aquí os dejamos algunos consejos:

1. Mantener la piel limpia: Es importante ducharse diariamente, especialmente después de sudar, y usar un limpiador suave que no obstruya los poros.
2. Exfoliación: Utilizar exfoliantes suaves para eliminar las células muertas de la piel es una buena práctica para prevenir los granos, pero hay que tener en cuenta no frotar demasiado fuerte para no irritar la piel.
3. Ropa adecuada: Usar ropa suelta y de materiales transpirables es una buena opción para reducir la fricción y permitir que la piel respire.
4. Cuidado con los productos: Te recomendamos elegir productos para el cuidado de la piel y el cabello que sean no comedogénicos, es decir, que no obstruyan los poros.
5. Evitar tocar la piel: Rascarse y apretar los granos puede empeorar la inflamación y causar cicatrices, así que hay que evitarlo.
6. Tratamiento tópico: Aplicar tratamientos tópicos que contengan ingredientes como peróxido de benzoilo o ácido salicílico ayuda a controlar el acné.
7. Consultar a un dermatólogo: Si el acné en la espalda es severo o persistente, lo mejor es buscar la orientación de un dermatólogo para un tratamiento adecuado.