El contorno de ojos es una de las zonas que requieren más atención y cuidado. Esta zona del rostro tiene una piel 4 veces más fina que la del resto del cuerpo y necesita un cuidado específico más intensivo a partir de los 25 años.
Te contamos los mejores consejos y tips de belleza: hidratación, masajes, dormir bien. Descúbrelos.
Protección: por su fragilidad, esta parte de la cara requiere de un tratamiento especial para combatir los efectos del sol y evitar así el envejecimiento prematuro.
Hidratación: la piel es menos resistente que en el resto del rostro por lo que en el contorno de los ojos necesitamos mayor hidratación para permitir más elasticidad y evitar las temidas arrugas.
Producto específico: el contorno de ojos precisa de un producto específico. Se recomienda evitar la crema facial porque es demasiado grasa y podría producir el efecto contrario al deseado. Es decir, se podrían producir bolsas porque la piel no pueda asimilarla correctamente. En el caso de los correctores, es necesario elegirlo un tono más claro que el tono de piel para que la zona se ilumine. Optar por un tono más oscuro agravaría el problema.
Aplicación: la forma de manipular la piel en esta parte del rostro es esencial, nunca debemos ser bruscos ni estirarla en exceso. Los productos, sean de tratamiento o cosméticos, deben aplicarse a toquecitos y siempre desde el interior, es decir, desde la zona bajo el lagrimal, hacia el exterior. Se recomienda evitar arrastrar producto con algodones y abusar de las brochas o esponjas, que podrían eliminar la hidratación natural de la piel.
Masaje: los masajes en cualquier zona favorecen la circulación de la sangre y tienen como consecuencia una mejora en la piel. Además de la aplicación con toques, se puede masajear la zona e, incluso, hacer pequeños ejercicios de gimnasia facial para activar el contorno.
Truco exprés: Si tienes un evento y tus ojeras o bolsas son muy visibles, un truco infalible es humedecer unos algodoncitos en loción hidratante, dejarlos en el congelador unos minutos y aplicarlos a continuación sobre los ojos. El frío provoca una aceleración del riego sanguíneo deshinchando visiblemente el párpado.
Tus aliados:
- El sueño: es un consejo muy básico, pero efectivo. Descansar al menos 7 horas al día mantiene los ojos relajados, reduce el parpadeo típico del cansancio y evita las bolsas que produce la fatiga.
- El agua: bebe al menos 1,5 litros al día. Ayuda a eliminar toxinas y a prevenir la hinchazón de las bolsas de debajo de los ojos. Además, se recomienda tomar frutas y vegetales ricos en líquidos (y en vitamina C) como piña, melón, manzana o naranja.
- El frío: los remedios más efectivos coinciden en tener el frío como protagonista. Las clásicas rodajas de pepino, las bolsitas de té, las cucharas frías… todos actúan en la zona revitalizando la piel del rostro.