Estrecha lazos con tus brochas y pinceles y maquíllate como una profesional
¿Recuerdas la famosa escena de Pretty Woman en la que Vivian está aprendiendo cómo usar cada tenedor? Tenedor de ensalada, tenedor de pescado, tenedor de carne, tenedor de postre… “si te lías, cuenta las puntas”. Partiendo de la hipotética base de que recuerdes cuántas tenía cada uno, claro.
Aun así, Vivian, como era de esperar, monta un follón considerable. Ya sabes. “¿Dónde está la ensalada? ¡Era el tenedor que yo conocía!” Pues con las brochas suele pasarnos por lo general (a no ser que pilotemos mucho o que seamos maquilladoras profesionales) lo mismo que a la Roberts con los tenedores. Nos sacan de la del colorete y es en plan… “anda, ¿pero que hay más?” Pues sí, amiga: hay más. Y una vez las descubras,verás el tiempo que has estado perdiendo sin ellas.
Esto es como todo: tú puedes maquillarte como tengas costumbre o como quieras, pero siempre lo harás mejor usando los productos y utensilios apropiados, ¿verdad? Pues bien, estas son nuestras herramientas, nuestras claves para estar más guapas todavía (que ya es difícil, porque somos divinas). Recuerda que ningún pintor utiliza siempre la misma brocha… ni Vivian comía siempre con el mismo tenedor.
Vale, bien, eso está genial. Y ahora… ¿cuántas brochas hay y para qué sirven?
Al lío.
- Pincel de sombras: Sombra aquí y sombra allá… ya te sabes la canción. El gran conocido, el famoso, el tan ocupado pincel de sombras. Presente en cada cuarto de baño. Y casi en todas partes por donde se mueva una mujer que suela pintarse los ojos.
- Pincel lápiz de ojos: ¿Sabes para qué va genial? Si tienes por costumbre usar eyeliner en crema, se convertirá en tu nuevo mejor amigo. Lo utilizarás casi a diario para aplicar la sombra en polvo o en crema de una forma muy precisa tanto en el párpado inferior como en el superior. Si eres fan de los ahumados, verás lo sencillo que te resultará marcarte uno y presumir de ojazos.
- Brocha polvos y colorete: Su nombre la define. Es de las más populares, una de las imprescindibles en neceseres y tocadores, la influencer en su campo. Te dará el toque de color necesario para animarte la cara en cualquier momento del día. Marcará a la perfección tus facciones y enmarcará tu rostro como si estuviera hecha para ello. Que lo está, vaya.
- Brocha maquillaje fluido: Si eres de las que suele utilizar esponjita o incluso la mismísima mano (¡cómo osas!), que sepas que en cuanto la pruebes, verás la diferencia. El acabado de tu maquillaje será mucho más profesional. Se debe colocar la cantidad necesaria de producto sobre la mano y con la brocha, ir cogiendo pequeñas cantidades, como si estuviéramos cogiendo pintura para un lienzo. ¿Sabes lo mejor? Todas esas pequeñas imperfecciones que tanta rabia te dan, quedarán cubiertas como por arte de magia.
- Brocha mofeta: Que estemos o no de acuerdo con el nombre escogido… (que sus razones tendrá) ya es independiente de sus usos y maravillas varias. Está compuesta por dos tipos de fibras que hacen de ella una de las más útiles y versátiles: sirven tanto para maquillaje fluido o en polvo. El acabado queda natural siempre y cuando realices la aplicación desde el centro de la cara hacia el exterior. Prueba y verás.
- Brocha Kabuki: Igual no tenías ni idea de su nombre, pero es la que más usas en verano sobre todo. Sí, nos referimos a la brocha corta que siempre llevas encima para retocarte los polvos del sol y coger ese tono tan saludable y favorecedor. Es perfecta tanto como polvos sueltos como para colorete. Y ya sabes que no puedes vivir sin ella.
A veces solo hace falta un pelín de dedicación para cuidarnos un poquito mejor y conseguir un resultado mejor de nuestro make up diario. Tampoco es tanto lío, ¿verdad? Piensa en los tenedores… eso, sin lugar a dudas, es peor.
- Pincel de sombras: Sombra aquí y sombra allá… ya te sabes la canción. El gran conocido, el famoso, el tan ocupado pincel de sombras. Presente en cada cuarto de baño. Y casi en todas partes por donde se mueva una mujer que suela pintarse los ojos.
- Pincel lápiz de ojos: ¿Sabes para qué va genial? Si tienes por costumbre usar eyeliner en crema, se convertirá en tu nuevo mejor amigo. Lo utilizarás casi a diario para aplicar la sombra en polvo o en crema de una forma muy precisa tanto en el párpado inferior como en el superior. Si eres fan de los ahumados, verás lo sencillo que te resultará marcarte uno y presumir de ojazos.
- Brocha polvos y colorete: Su nombre la define. Es de las más populares, una de las imprescindibles en neceseres y tocadores, la influencer en su campo. Te dará el toque de color necesario para animarte la cara en cualquier momento del día. Marcará a la perfección tus facciones y enmarcará tu rostro como si estuviera hecha para ello. Que lo está, vaya.
- Brocha maquillaje fluido: Si eres de las que suele utilizar esponjita o incluso la mismísima mano (¡cómo osas!), que sepas que en cuanto la pruebes, verás la diferencia. El acabado de tu maquillaje será mucho más profesional. Se debe colocar la cantidad necesaria de producto sobre la mano y con la brocha, ir cogiendo pequeñas cantidades, como si estuviéramos cogiendo pintura para un lienzo. ¿Sabes lo mejor? Todas esas pequeñas imperfecciones que tanta rabia te dan, quedarán cubiertas como por arte de magia.
- Brocha mofeta: Que estemos o no de acuerdo con el nombre escogido… (que sus razones tendrá) ya es independiente de sus usos y maravillas varias. Está compuesta por dos tipos de fibras que hacen de ella una de las más útiles y versátiles: sirven tanto para maquillaje fluido o en polvo. El acabado queda natural siempre y cuando realices la aplicación desde el centro de la cara hacia el exterior. Prueba y verás.
- Brocha Kabuki: Igual no tenías ni idea de su nombre, pero es la que más usas en verano sobre todo. Sí, nos referimos a la brocha corta que siempre llevas encima para retocarte los polvos del sol y coger ese tono tan saludable y favorecedor. Es perfecta tanto como polvos sueltos como para colorete. Y ya sabes que no puedes vivir sin ella.
A veces solo hace falta un pelín de dedicación para cuidarnos un poquito mejor y conseguir un resultado mejor de nuestro make up diario. Tampoco es tanto lío, ¿verdad? Piensa en los tenedores… eso, sin lugar a dudas, es peor.