A la hora de maquillar los párpados caídos, existen ciertos consejos y trucos que te ayudarán a realzar y revitalizar tu mirada. ¡Descúbrelos todos!
Para saber si en realidad tienes los párpados caídos, tienes que fijarte en si la parte móvil del párpado se ve o no. En el caso de que no puedes verla, la respuesta es clara.
Ptosis palpebral o blefaroptosis es el término médico para la caída del párpado superior de uno o ambos ojos. No hay una única causa y es importante valorar cada caso de forma particular. El párpado se mantiene sobre el ojo, gracias a la acción tensora de su músculo elevador. La atrofia o el mal funcionamiento de éste provoca la caída del párpado. Este es el problema más habitual, pero también es habitual que exista un exceso de piel, cuyo peso y volumen provoca la caída.
¿Cuáles son los factores más frecuentes a este problema?
- Paso del tiempo y envejecimiento: con el paso del tiempo, la piel deja de ser tersa o pierde elasticidad. El párpado se va cayendo a medida que la persona va envejeciendo, el músculo elevador pierde potencia y la piel se vuelve más flácida y pesada. Este tipo de caída de párpado se denomina aponeurética.
- Patología congénita, de nacimiento: por herencia genética, el párpado se presenta caído desde nacimiento o puede manifestarse más tarde. La atrofia del músculo es congénita y no funciona de forma correcta, ya que el párpado no tiene la tensión correcta. Este tipo se llama miogénica.
- Problemas del sistema nervioso: la falta de señal nerviosa en el músculo del párpado se llama neurógena. En este caso, el problema es que el nervio encargado de transmitir la señal de movimiento y tensión al párpado no funciona o no lo hace correctamente, lo que provoca la caída del párpado. Es frecuente en niños.
- Tumores o bultos en los párpados: se llama mecánica cuando el párpado se cae por la aparición de un bulto o tumor en el párpado superior que obliga a un desplome mecánico de esta zona del ojo.
- Otras enfermedades: algunas patologías pueden afectar a los músculos o nervios del ojo y causar la caída del párpado de forma temporal o crónica, como la diabetes, el Síndrome de Horner (afección que afecta la cara y el ojo de un lado del cuerpo) o un accidente cerebrovascular. Las afecciones oculares como la conjuntivitis, los orzuelos o cualquier otro tipo de infección bacteriana o vírica pueden provocar la caída del párpado también.
Cómo maquillar los ojos caídos
- Iluminador: aplícalo solo debajo del arco de la ceja para matizar el párpado. Si lo haces por toda la ceja, puede crear el efecto de un párpado no-móvil, con la sensación de que sea aún más grande, y acentuarlo más.
- Corrector, prebase o sombra nude: úsalo por todo el párpado para unificar el tono, así crearás la base perfecta para favorecer la mirada.
- Oscurece la zona del rabillo del ojo: para contrarrestar la caída del párpado, ya que en esa zona es donde más se suele caer. Lo ideal es aplicarla elevándola y alargándola, pero, eso sí, no te olvides de difuminarla para que el resultado sea perfecto.
- Eyeliner: si usas eyeliner para la raya del ojo, que no sea grueso, ya que, si la raya del ojo es muy gruesa, tapa la zona del párpado móvil y parece que el ojo sea más pequeño. Apuesta por un eyeliner invisible o Tightlining para realzar tu mirada. Se trata de una técnica de maquillaje que consiste en marcar la línea de agua de las pestañas de arriba (zona interna del párpado) con un eyeliner de forma invisible, pero con un resultado que cambia tu mirada y consigue rejuvenecerla y abrirla mucho más.
- Sombra: usa sombra para la línea inferior de las pestañas, pero que no sea eyeliner. Si aplicas un poco de sombra en la parte externa e inferior del ojo, uniéndola con la del rabillo, realzarás tu mirada. No olvides difuminarla bien.
- Máscara de pestañas: aplícala, sobre todo, en la parte más externa del ojo, ya que esto hará que tu mirada se agrande mucho más.
- Procura mantener la forma natural de tus cejas en lugar de extenderlas hacia abajo, eso haría parecer a tu ojos todavía más caídos y pequeños.
Hábitos para los ojos caídos
Todos los tipos de ptosis pueden tratarse para mejorar la apariencia del ojo, corrigiendo por completo el problema, mejorándolo o evitando que empeore y aliviando los síntomas. Por eso se recomienda consultar con el médico de forma inmediata ante los primeros signos. Hay una gran variedad de posibilidades que van desde tratamientos estéticos, como con botox o cosméticos, hasta cirugías más profundas, como blefaroplastia, lifting de cejas o hilos tensores.
Pero, ¿qué podemos hacer en casa? La gimnasia ocular o yoga facial nos puede ayudar en los casos de caída de párpado leve o cuando se empieza a ver este efecto y se quiere frenar o retener la zona, principalmente, por envejecimiento.
La estimulación y tensión de los músculos de la zona del párpado a través de gimnasia facial y/o masaje estimulante es una solución sencilla y económica que solo requiere un poco de aprendizaje, constancia y unos 10 minutos al día. Eso sí, los resultados no son rápidos, pero son efectivos.
Ejercicios
- Ejercicio 1. Cada mañana, abre y cierra los ojos, mirando lo más arriba que puedas, al menos treinta veces y procurando mantener la presión constante en tus párpados.
- Ejercicio 2. Mueve los ojos en dirección a las manecillas del reloj durante tres minutos, tres veces a la semana.
- Ejercicio 3. Con las yemas de los dedos, moviliza la piel hacia arriba y atrás, como si dibujaras líneas rectas.
- Ejercicio 4. Presiona las cejas con fuerza e inténtalas levantar, conseguirás reafirmar los párpados por la resistencia que ejercerá tu piel al levantarla.