Desde hace unos años el aceite de argán se ha convertido en un agente indispensable en el mundo de la belleza. Por eso, no es de extrañar que hoy en día existan múltiples productos cosméticos, tanto para la piel como para el cabello, elaborados a partir de esta esencia milenaria.
Y es que, aunque sea uno de los ingredientes de moda y nos resulte una novedad, el aceite de argán se trata de un producto con mucha historia. A continuación, te contamos de dónde proviene esta esencia milenaria, las propiedades del aceite de argán y sus múltiples beneficios en el mundo de la cosmetología.
Origen del aceite de argán
El aceite de argán, también conocido como “oro del desierto”, es una esencia originaria de Marruecos, que se obtiene gracias a los frutos del árbol de argán. Este aceite tiene un valor tanto alimentario como cosmético, pero dependiendo del uso que vaya a darse, el proceso de obtención es diferente.
Para obtener este aceite con fines alimentarios, primero se someten a los frutos de este árbol a un proceso de secado y una vez listos, se extraen las semillas manualmente y se prensan para obtener un aceite de color dorado oscuro y con un olor muy característico.
En cambio, el proceso de obtención del aceite de argán con fines cosméticos, es ligeramente diferente, ya que, para obtener esta esencia, no es necesario tostar los granos, pero si someterlos a un proceso de prensado en frío para obtener un aceite dorado muy claro y con un olor apenas apreciable.
Características del aceite de argán
El aceite de argán se caracteriza por ser altamente nutritivo, esto se debe a su riqueza en ácidos grasos saturados y ácidos grasos como el ácido linoleico y el ácido oleico.
Además, contiene caroteno, esteroles, terpeno, polifenoles y tocoferoles con un alto poder antioxidante, lo que facilita su conservación natural.
En cuanto a su aspecto, esta esencia posee un color dorado muy claro, un olor suave y un tacto ligero y nada pegajoso, lo que lo convierte en un aceite con una gran capacidad de absorción tanto en la piel, como en el pelo.
Aceite de argán para la piel: beneficios
Hoy en día puedes encontrar este aceite en diferentes productos y formatos cosméticos, desde el desmaquillante, hasta la crema facial, pasando por el gel de baño o incluso en su formato original en aceite. Y es que, aunque seguramente conozcas que esta esencia es altamente nutritiva, igual no conoces las diferentes propiedades que lo han llegado a convertir en un producto indispensable en la cosmetología moderna. A continuación, te contamos los beneficios del aceite de argán para la piel.
- Efecto hidratante: tiene una gran capacidad de nutrición, por lo que es muy beneficioso para aquellas pieles más secas o deshidratadas.
- Ayuda a corregir el acné: al tener propiedades calmantes ayuda a desinflamar el acné y a prevenir los tan temidos puntos negros.
- Gran poder cicatrizante: el aceite de argán ayuda a la regeneración celular, por lo que ayuda al tratamiento de quemaduras y heridas en nuestra piel.
Con la llegada del invierno a la vuelta de la esquina, nuestra piel puede llegar a resentirse, descubre cómo cuidar cada tipo de piel en nuestro artículo sobre «Las propiedades de los aceites esenciales».
Aceite de argán para el cabello: beneficios
Esta esencia también se ha convertido en un ingrediente fundamental para el cuidado del cabello. A continuación, te hablamos de los beneficios puede aportarte el uso del aceite de argán en tu rutina capilar.
- Pelo nutrido y sin encrespamiento: nuestro pelo contiene de forma natural aceite dentro de sus fibras, lo que le confiere de forma natural elasticidad y brillo. A consecuencia del uso del secador, la plancha y el tinte, estos aceites se van perdiendo, por lo que la riqueza en nutrientes, ácidos grasos esenciales y potentes antioxidantes que contiene el aceite de argán nos ayudará a mantener nuestro pelo nutrido y acondicionado. El uso de esta esencia tanto en el champú como en la mascarilla o el sérum nos ayuda a reponer este aceite perdido y además… ¡A combatir el encrespamiento!
- Ayuda a combatir los daños: los ácidos grasos que se encuentran en el aceite de argán, ayudan a prevenir la rotura del cabello a consecuencia de los múltiples lavados y las herramientas de calor y definición del pelo.
- Rizos definidos: el cabello rizado tiende a deshidratarse más fácilmente y con ello, a perder la estructura natural de los rizos. Una correcta rutina capilar para pelo rizado, junto al aceite de argán en sérum es el mejor aliado para llegar a los recovecos de más difícil acceso en el pelo rizado, como las puntas. ¡Te contamos cómo sacar partido a tus rizos en nuestro artículo «Qué es el método curly»!