¿Tienes las manos agrietadas por el frío? Te contamos a qué se debe y cómo puedes repararlas con la crema y consejos adecuados. ¡Cuida tus manos desde ya!
Las manos son una de las partes del cuerpo que más expuestas están a las bajas temperaturas en invierno y, si no se protegen, es habitual que sufran grietas a causa del frío. Éstas pueden causar dolor, picor y muchas molestias.
¿Por qué se nos agrietan las manos por el frío?
Durante las épocas más frías del año, el ambiente suele volverse más seco y las manos, al estar continuamente expuestas, van perdiendo la capa humectante que las cubre, con lo que se van generando pequeñas grietas en ellas.
Otros motivos que pueden causar la aparición de grietas son los cambios bruscos de temperaturas y en invierno esta situación es muy común, ya que solemos pasar del ambiente cálido de casa, al frío de la calle, con lo que las manos se resienten. Del mismo modo, las personas que se lavan las manos con agua caliente muy a menudo, también tienen más probabilidades de que le aparezcan grietas.
Cómo evitar tener las manos agrietadas con el frío
Para evitar la sequedad de las manos y la posible aparición de grietas y/o heridas, es importante seguir una serie de hábitos de cuidado e hidratación de la piel:
- Bebe agua, al menos 1,5 litros al día.
- Después de lavarte las manos, seca tu piel con una toalla o papel, si usas un secador de mano, las resecarás más.
- Utiliza jabones suaves, hidratantes y, a ser posible, sin fragancia. Además, es importante que la piel no entre en contacto directo con sustancias tóxicas.
- Para lavarse las manos, mejor agua tibia.
- Si sales a la calle, ponte guantes y tus manos estarán más protegidas.
Cremas para las manos agrietadas por el frío
Existen en el supermercado multitud de cremas para cuidar nuestras manos. Desde las reparadoras y regeneradoras, hasta las enriquecidas con aceite de oliva, rosa mosqueta, aloe vera, karité o urea. Te invitamos a pasarte por nuestra sección de perfumería para descubrirlas.
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