Aprende cómo aplicar la crema facial correctamente con estos sencillos consejos. ¡Descubre cómo aprovechar al máximo los beneficios de tu crema facial!
Cómo aplicar la crema facial correctamente
Una buena rutina de skincare es fundamental para lograr un cutis perfecto, pero también lo es aplicar las cremas de forma adecuada. Además, si aprovechamos el momento de aplicar nuestros productos cosméticos para darnos un masaje facial, conseguiremos activar el riego sanguíneo de la zona y que las células se oxigenen para que los activos de nuestra rutina facial se absorban con mayor rapidez. El cuello es un gran olvidado en nuestra rutina, pero deberíamos de cuidarlo con el mismo mimo que cuidamos de nuestro rostro. ¡Este también envejece! Al igual que en la cara, los serums y cremas en el cuello hay que aplicarlos siempre con movimientos ascendentes.
Cómo aplicar la crema facial solar
Toda buena rutina facial debe incluir un protector solar facial. Se trata del último paso de la skincare porque su función es la de ejercer una barrera protectora en nuestra piel, que nos cuide del sol y de los daños que este puede provocar en nuestra piel como: las quemaduras; las manchas solares; el melasma o el envejecimiento prematuro, entre otros.
Crema solar facial: cantidad adecuada
La cantidad recomendada por los expertos de crema facial solar en el rostro es de 2mg por cm2. Calcular esta cantidad es bastante difícil por lo que te recomendamos aplicar la “regla de la uve” o de los dos dedos. Esto es aplicar una raya de crema solar a lo largo de cada uno de los dos dedos y se considera la cantidad necesaria para que la aplicación y protección solar sea efectiva.
Crema solar facial: cada cuánto aplicarla
El protector solar en el rostro hay que aplicarlo todos los días tras la crema hidratante, por lo que, deberías de utilizarlo cada vez que te expongas al sol… ¡Hasta cuando esté nublado! El sol emite rayos perjudiciales para la piel durante todo el año, aún y cuando no lo parezca.
Hay que aplicar el protector solar 30 minutos antes de que vayas a tomar el sol y, sobre todo, reaplicar el protector solar:
- Cada dos horas si no estás en contacto con el agua.
- Repetir la aplicación después de bañarse, secarse o transpirar.